- INDIA necesita de toda una vida para ser conocida. Como si de un regalo en forma de realidad se tratara, esta tierra es capaz de mostrate todas las caras de la humanidad, desde la mayor de las codicias, la insignificancia de las personas o el machismo desbordado, hasta el fervor por las tradiciones, los colores de su cultura o el aroma de pureza más embriagador que uno podrá encontrar.

 

No existe una única Índia, sinó que esta como si de un gran mar se tratara, es bañada por diferentes rios de paisajes, climas, gentes, e infinidad de sensaciones que uno va descubriendo a medida que el cuerpo y la mente van adaptándose a tal explosíon de cambios.

 

Y es que hayar la paz de espíritu que se atribue a este lugar es más bien una lucha diária de supervivencia interna. La India hará que tus sentidos se abran paso hacia la experimentación y al trabajo constante, no por voluntad propia, sinó que será tanta la carga de sensaciones que uno descubrirá en su viaje, que la tranquilidad debe ser entendida como una forma de comunicación interna, de conocimiento a los propios límites y al control de tus actos.

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Como si la vida hubiera decidio anclar su máxima expresión en esta tierra, la velocidad y la calma más auténticas hacen de este lugar el círculo vital más apasionante por el que se pueda navegar. -